03/02/2020

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Uno de los motivos por lo que la gente visita Córdoba es por su maravillosa gastronomía, conocida en todo el mundo por su exquisitez y variedad. Entre los platos más conocidos y que atraen más paladares de todo el mundo, quizás el más laureado sea el salmorejo. Este plato, adoptado como parte de la gastronomía española, es originario de Córdoba y tiene su origen a principios del siglo XX, aunque no se conoce con exactitud.

El actual plato, aquella reconocible crema naranja que abunda en todas las tabernas típicas cordobesas es una elaboración hecha a base de ingredientes muy básicos: pan de telera, aceite de oliva virgen extra, ajo, sal y su ingrediente estrella, el tomate. Suele estar acompañado por huevo duro picado y trozos de jamón serrano por encima y se le considera como una especie de gazpacho pero más condensado, por lo que es más bien un primer plato, aunque también se sirve frío.

Tiene unos orígenes humildes al igual que lo son sus ingredientes. Se le empezó añadir tomate a partir del siglo XIX pero hasta esa fecha se solía elaborar una especie de gazpacho blanco, también llamado mazamorra, que se elaboraba con los mismos ingredientes salvo el tomate. Este tipo de cremas si nos remontamos desde la misma base de la gastronomía, tiene sus andares desde que la humanidad empezó a triturar ingredientes y mezclarlos, hace miles y miles de años…Pero el antecedente quizás más claro del salmorejo blanco provendría de la época romana, pues los romanos elaboraban una especie de crema hecha a base pan de trigo triturado con vinagre y agua, siendo muy frecuente en las mesas de las clases más humildes.

Con la llegada de los musulmanes a la península ibérica el antiguo recetario romano fue heredado en gran medida y se cree que en este periodo es cuando se le añade a esa antigua crema romana, llamado posca, el ajo, adquiriendo más parecido con la mazamorra o salmorejo blanco.

Pero no sería hasta finales del siglo XIX cuando el afán por experimentar nuevos saberos en la ya variada gastronomía local produjo la bonita casualidad de echar un tomate a la ya conocida mazamorra de agua, pan, aceite y ajo. El salmorejo se empezó a enrojecer pero no era para nada parecido al color actual, pues se resultaba muy complicado tratar de triturar el tomate, por lo que se picaba simplemente y se le añadía a dicha mezcla. Pero gracias a la electricidad y en concreto a la batidora eléctrica, la función que realizaba el mortero fue sustituida por dichas batidoras para mejorar el triturado y así nace el actual salmorejo, que en pocos años sería exportado al resto del territorio español y se convertiría en una de los platos españoles más conocidos en el mundo.

Desde luego el mejor plan que se puede hacer en Córdoba a la hora de comer es acercarse a cualquiera de sus tabernas típicas y comer salmorejo, el cual no suele defraudar a sus comensales. Pero antes te proponemos otro plan. Si lo que tienes es hambre de historias, curiosidades y leyendas, nuestros guías de Córdoba Tips Tour pueden saciar tu curiosidad con nuestras visitas guiadas de “Casco Histórico” y “Leyendas de la Judería”. Nos encontramos todos los días en el punto de encuentro en la Puerta de Almodóvar a las 11 de la mañana y a las 5 de la tarde, respectivamente, preparados para explicarte la Historia de nuestra maravillosa ciudad. Nosotros no vamos de naranja salmorejo pero estamos seguros de que el amarillo también te va a gustar. ¡Te esperamos con nuestros paraguas!