DESCUBRIENDO LA PLAZA DE LA CORREDERA

Monumentos

¿Habéis oído hablar de la Plaza de la Corredera? Se trata de uno de los lugares más emblemáticos del casco histórico de la ciudad de Córdoba. Se encuentra a pocos metros del ayuntamiento de la ciudad, y es la mayor plaza cuadrangular de Andalucía.

 

Según recogen las fuentes historiográficas, en el periodo romano se encontraba en el mismo lugar el circo romano. La documentación señala que hasta el siglo XV fue una explanada situada a extramuros de la Medina, en la que se llevaban a cabo actividades comerciales, aunque en época musulmana se piensa que pudo ser un lugar dedicado al comercio, como posteriormente volvería a ser.

Durante la Edad Media, tras aprobar el rey Carlos I la construcción de una plaza cuadrangular, se realizaron diversas ejecuciones por parte de la Inquisición con personas que habían sido culpadas de hechos como brujería, falsos conversos, etc. Esto ha dado lugar a múltiples historias y leyendas, pues hay quienes aseguran que el propio verdugo vivía en la plaza, evitando que muchos transitaran por el lugar, y solo acudieran a él para ver las prácticas llevadas a cabo por dicha institución.

 

Posteriormente, pasó a ser una zona en la que los ciudadanos acudían frecuentemente para hacerse con material para sus propias casas, es decir, una cantera. Esta situación es bastante similar a la que se vivió hasta hace varias décadas con la antigua ciudad palatina de Mediana Azahara, la cual ha sufrido un grave expolio.

 

Con el tiempo, la ciudad decidió construir la Casa de Doña Jacinta y el Mercado de Sánchez Peña, siendo donde se estableció en época moderna una cárcel. Además, en ese periodo se estableció una fábrica dedicada a la elaboración de sombreros por el empresario que dio lugar a que el mercado tenga este nombre en la actualidad.

También fue un lugar en el que se llevaron a cabo espectáculos taurinos, de ahí a que hoy en día tenga este nombre. Finalmente, en la plaza dejaron de celebrarse corridas de toros desde el siglo XIX, siendo en esa misma época, cuando empezó a construirse en medio de la plaza el mercado de abastos. Este permaneció vigente hasta el año 1959.

 

Por otra parte, debemos señalar que la similitud que muchos ven en la plaza con la Plaza Mayor de Madrid, se debe a que el corregidor Ronquillo Briceño fue el encargado de llevar a cabo la construcción de esta última. Por tanto, la de Córdoba se habría inspirado en esta, teniendo como elemento principal para su construcción el ladrillo.

 

 

Durante la alcaldía de José Antonio Cruz Conde, se llevaron a cabo una serie de modificaciones en la estructura del complejo, hasta que Julio Anguita decidió darle una nueva concepción, puesto que en los últimos años había pasado a ser tras la desaparición de los distintos puestos que conformaban el mercado, una zona poco transitada. Para ello, se han establecido una serie de bares y tiendas con productos típicos de la ciudad y de larga tradición histórica, siendo una de las mejores zonas de ocio.

Debido a que es un espacio en el que se han ido desarrollando distintas actividades a lo largo del tiempo, esto ha dado lugar a que se lleven a cabo diferentes remodelaciones. Gracias a estas reformas, se han podido realizar importantes hallazgos como por ejemplo un conjunto de mosaicos del periodo romano, que hoy en día se encuentran en el Alcázar de los Reyes Cristianos. Estas piezas se encuentran en una sala conocida con el nombre de la Sala de los mosaicos.

 

No debemos olvidar, que fue gracias al arquitecto Ramós Valdés, por quien disfrutamos de la actual plaza en 1683, pero debido a los problemas higiénicos que hubo entre los siglos XIX-XX, se derribó el mercado, logrando la rehabilitación y mejora del lugar a partir de 1980.

Hay quienes consideran que este no es un buen ejemplo de unidad desde el punto de vista urbanístico, pero se han conservado edificios de distintos periodos, lo que ha hecho posible que hoy en día sea uno de los lugares más característicos de la ciudad. Ejemplos son varios los que podemos encontrar, como el Pósito, que se trataba de un granero que servía para abastecer a la población de Córdoba, la antigua cárcel que hemos mencionado anteriormente y que hoy en día alberga el mercado.

Además, a lo largo del tiempo han sido numerosos personajes, relacionados en su mayoría con el espectáculo, y negocios de conocido renombre en la ciudad los que formaron parte de la historia de la Plaza de La Corredera como la Taberna la Cordobesa y la Tomasa. También, sirvió de inspiración para el mundo de la picaresca en la literatura española.

Desde la década de 1980, la Plaza de la Corredera ha sido escenario de diversos festejos, siendo además nombrada como bien de interés cultural, como la Noche Blanca del Flamenco, celebrada entre el segundo y tercer fin de semana del mes de junio.

 

Así que, queridos turistas si os animáis a venir a Córdoba en estos meses de verano, tras realizar una ruta con nosotros en el horario de mañana o de tarde, podréis pasear y conocer lugares tan simbólicos de la ciudad como este. Además, en la ruta de la Judería, el último punto del tour está muy cerca de la plaza, ¡animaros y visitarnos¡

Este Sitio Utiliza Cookies. Usted Puede Leer En Nuestra Política De Cookies. Aceptar